Una vez que el fotógrafo haya acabado su trabajo con nuestro novio, se le comunicará al entorno de la novia que el fotógrafo va hacia el lugar donde ella se encuentra. Igualmente estaremos allí para todo en lo que podamos ayudar, desde tranquilizar a la novia hasta hacer algún arreglo de costura de última hora.
Recibiremos a los invitados en la ceremonia, indicaremos a los proveedores que estén listos para música, fotografía...
Nos encargaremos de repartir pétalos, arroz y de demás cosas que los novios hayan decidido. Indicaremos al restaurante o catering la hora de llegada, ubicaremos a los comensales en sus mesas.
Coordinaremos los momentos del banquete más importantes como sorpresa, regalos, videos...
Al terminar el banquete nos quedaremos con la novia para ayudarle en lo que necesite referente a cambio de vestuario o similar, pero a la vez nos encargaremos también de llevar a los invitados al espacio destinado a barra libre y baile.
Indicaremos la apertura del baile nupcial y disfrutaremos de ese baile y de esa felicidad que nuestros novios irradian, junto al resto de invitados, porque esa felicidad es nuestra también, al saber que todo ha salido de la forma más bonita posible.
PERO....
Ahora empieza la fiesta!!!
Por ello ya tendremos que tener supervisado que todos los proveedores destinados a este momento de fiesta (ej: mesa dulce, photomatón, 360º, hora loca...) tengan todo montado y listo para que invitados y novios disfruten.
Y antes de irnos y dejar la fiesta por todo lo alto, nos aseguraremos que el transporte de vuelta esté listo para las horas estipuladas.
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